De manera semejante al otro profeta mencionado en este capítulo, Jahaziel, también Eliezer es citado solamente  una sola vez en toda la Biblia y ambos eran contemporáneos.

1.Época y ocasión  en que profetizó Eliezer (vv.31-36)


La porción en que se encuentra la mención de su profecía (v.37) es un resumen que hace el cronista del reinado de Josafat.

1. La época (vv.31-32). Uno y otro profetizaron durante el reinado de Josafat, rey de Judá aunque sus mensajes fueron distintos, pues  Jahaziel fue usado por Dios para dar una respuesta al rey a su oración  pidiendo la ayuda divina contra la coalición de ejércitos que les habían invadido. En cambio, Eliezer, profetizó también al rey, pero para recriminarle  que había obrado mal aliándose con el rey Ocozías de Israel, sucesor e hijo de Acab y Jezabel. El reinado de este duró escasamente dos años. Subió al trono en el año 17 del rey Josafat, rey de Judá.  Ocozías hizo lo malo ante los ojos de Yahweh, y anduvo en el camino de su padre, y en el camino de su madre, y en el camino de Jeroboam I,  hijo de Nabat, el que hizo pecar a Israel. Sirvió a Baal, la divinidad que había introducido su madre en Israel y la adoró. Lo único que sabemos de Eliezer es que era de Maresá, una localidad situada en la zona montañosa occidental de Judá. Su nombre significa "Dios es mi ayuda" y en la Biblia hay siete personajes con el mismo nombre.
2. La ocasión (vv.33-36). Aunque Josafat hizo lo recto antes los ojos de Yahweh durante los 25 años de su reinado, sin embargo, no acabó de limpiar a Judá de la idolatría que había en los lugares altos y que había arraigado en el pueblo. Recordemos que Josafat tenía concertada una alianza con la dinastía del reino del norte y que en dos ocasiones este pacto le había puesto en dificultades comprometidas: cuando Acab le pidió que le ayudase en  la guerra contra Ramot de Galaad, una guerra que fue condenada por Micaías y Josafat amonestado por Jehú; La segunda ocasión es la que se menciona aquí, cuando trabó amistad con Ocozías y llegaron a formalizar un pacto para construir naves que fuesen a Tarsis en busca de oro de Ofir. La construcción de las naves tuvo lugar en Ezión-geber, un puerto del mar Rojo mencionado en cinco ocasiones en el AT (Nm. 33:5, 6; Dt. 2:8; 2 Cr. 8:17 y 20:36).


1. La profecía contra Josafat (v.37)

Notemos que a semejanza de otros profetas (Mal. 1:1), no es simplemente un mensaje para el rey, sino contra el rey por haber hecho una alianza condenada por Dios y además ya había tenido una experiencia desagradable con el padre de Ocozías.

1. Fue un mensaje directo y valiente (v.37b). Mientras se construían las naves en los astilleros del golfo de Aqaba, en lo que evidentemente era una gran inversión para  conseguir colosales ganancias, Eliezer le reprendió por lo que había hecho y le anunció que Yahweh destruiría las naves que habían construido como así ocurrió.
2. Es un mensaje de advertencia para la iglesia. El NT, insiste también en la necesidad de no hacer uniones desiguales con los incrédulos (2 Co. 6:14-17). No solamente es aplicable  a los matrimonios mixtos o a los negocios con socios no creyentes o impíos como hizo Josafat, sino también al ecumenismo con aquellas iglesias que no son genuinamente evangélicas, como denuncia José Hutter en un artículo en EC, con relación al catolicismo.

Conclusión. Aunque los tiempos han cambiado, el principio de no hacer alianzas con los que no adoramos el mismo Dios o no seguimos las mismas enseñanzas de la Biblia sigue vigente. El desobedecer este principio trae consecuencias desagradables y pérdidas a los que se empeñan en pasar por alto las instrucciones de la palabra de Dios.